domingo, 30 de marzo de 2014

Expresión oral – Taller de Cuentacuentos

El cuento tiene una gran relevancia en el desarrollo psicológico infantil, así como en la transmisión de la herencia cultural. Su valor educativo es indiscutible y es por ello que debe estar presente tanto en el hogar como en la escuela, como un recurso pedagógico fundamental.

A continuación expongo de forma muy breve un taller para explorar el arte de contar cuentos, realizado durante mi periodo de prácticas con mis alumnos. Este se basaba en que cada niño de forma individual tenía que prepararse la exposición de un cuento tradicional, para contarlo a sus compañeros en la jornada de cuentacuentos.

Con esta actividad, los alumnos aprenderán a través de la práctica sobre el cómo contar cuentos y las técnicas de preparación. Además el uso de diversos recurso como marionetas, imágenes o sonidos será utilizado por quien lo desee. Finalmente y tras cada intervención los propios compañeros serán quien evalúen al protagonista, a través de una valoración  crítica donde exponga su punto de vista sobre la misma, cualquier evaluación debe perseguir como fin prioritario construir el conocimiento y garantizar la progresión personal, académica y social de los individuos, en palabras de Manuel Abril[1].

Los objetivos principales:
    - Desarrollar, a través del taller de cuentacuentos, habilidades para contar una historia (cuento tradicional), mejorar la expresión oral, con la finalidad de utilizar esta herramienta en los diversos contextos de los estudiantes.  
            -   Sensibilizar en la narración oral, como herramienta de goce y de fomento lector.
      - Desarrollar habilidades teatrales necesarias para contar una historia.
      - Estimular la imaginación y la creatividad.

Es fundamental que estos alumnos logren ser competentes en la competencia comunicativa que se alcanza cuando el sujeto es capaz de usar de forma apropiada una serie de conocimientos y habilidades para actuar comunicativamente, no solo de una manera correcta sino adecuada al contexto y a la situación comunicativa. Sin embargo la oratoria en los adolescentes no es lo que mejor dominan, así refleja El País, en su artículo “Un cero en oratoria” ; he aquí la importancia de hacer este tipo de actividades de manera rutinaria.



Como conclusión, el cuento constituye una herramienta didáctica que se puede adaptar a las necesidades particulares de cada uno y que a partir de esta fuente se puede educar distintos planos educativos independientemente del área a estudiar. Por estas razones es necesario que los profesionales de la educación  y familias amplíen su educación y aprendizaje sobre este recurso didáctico, lo que posibilitará alcanzar una comunicación fluida por la adquisición de vocabulario y un buen hábito lector en los niños con posibles dificultades. 


[1] Abril, M. (2010). Leer y escribir en las aulas. Santa Cruz de Tenerife.